El argumento de la saga está basado en un supuesto y específico mundo digital conocido como Digimundo, que está habitado por unas criaturas o seres sorprendentes ficticias llamadas Digimon. Habitan en una isla y son formas de vida artificial y extrañas, creadas a partir de bits y piezas perdidas de datos de ordenadores (archivos de texto eliminados y recuperados con herramientas de recuperación de archivos), que viven dentro de los aparatos electrónicos que posean memorias no volátiles.