Nuestro joven héroe, Ash, conduce a sus amigos hacia las profundidades del bosque. Como no tiene brújula, debe confiar exclusivamente en su instinto, y eso significa problemas. Perdidos en el bosque, deciden descansar un rato sentándose en unas rocas. Al hacerlo, Ash ve a un Pokémon salvaje bebiendo de un charco de agua: Oddish. Ash saca una Poké Ball dispuesto a atraparlo, pero Misty le detiene diciéndole que es ella quien lo tiene que atrapar —”lo hemos encontrado junto al agua, y el agua es mi especialidad”, añade—. Para ello, saca a su Starmie y debilita al Pokémon con Pistola agua y Placaje. Lanza su Poké Ball para atraparlo, pero de repente, un Bulbasaur aparece en escena y la desvía con un golpe.