Después de que los cuerpos de dos jóvenes donantes de Los Ángeles apareciesen envenenados, Chloe y Lucifer van tras el asesino. En cuanto a Maze convenciendo a Chloe de salir a tomar unas copas, lo cual la detective percibe como un acto de amistad pero es en realidad una apuesta entre Maze y Lucifer, los dos toman una impactante decisión.