Apenados por la muerte de Shiryū, Seiya y los demás llegan a la casa XI de Acuario. Allí los espera Camus. Hyōga decide combatir solo y esto es aprobado por Camus, que deja pasar a Seiya y Shun. Hyōga está decidido a mostrar a Camus cuanto ha mejorado. Sin embargo, el aire frío de Hyōga no hace daño a Camus. Camus le recuerda a Hyōga sobre el cero absoluto, que es necesario para poder derrotar a un Santo Dorado. Hyōga, hace su mejor intento, pero es inútil. Finalmente Hyōga puede contrarrestar un ataque lanzando por Camus, pero está inconsciente. Justo a tiempo despierta para devolver el ataque lanzando por los aires a Camus, quien decide usar la Ejecución de Aurora. Hyōga adopta la misma posición y se produce el choque de aires fríos. Seiya y Shun sienten el choque de cosmos y saben que su amigo se está despidiendo de ellos.